33.000 millones de euros desaparecerán de las carteras de los jubilados españoles en los próximos 9 años según datos de la memoria que acompaña al anteproyecto de ley para la regulación del Factor de Sostenibilidad y del índice de revalorización del sistema de Seguridad Social.
En dicho anteproyecto, se establece que ya en 2014 será de aplicación el nuevo índice de revalorización que viene a sustituir al IPC. Para calcular dicho índice se tendrán en cuenta la inflación y los ingresos y gastos del sistema en un periodo de once años. En los años en que este saldo sea menos favorable las pensiones se revalorizarán por debajo del IPC interanual, con un mínimo del 0,25%, o sea, 1,5€/año.
En los buenos momentos las pensiones se incrementarán hasta IPC +0,25%. A partir de 2019 empezaría a funcionar el Factor de Sostenibilidad que se aplicaría a las pensiones causadas a partir del 1 de enero de dicho año. Este factor calculará la pensión de esos nuevos pensionistas atendiendo a su esperanza de vida.
En resumidas cuentas, la pérdida de poder adquisitivo en los próximos quince años estará en una horquilla que oscila entre el 15 y el 30%. Y la verdad es que hay alternativas: La primera pasa por activar políticas de empleo ya que es el abultado paro lo que ha creado la actual situación deficitaria junto a una decidida lucha contra la economía sumergida.
También se podría estudiar la subida de las cotizaciones o un incremento en las bases máximas de cotización, una equiparación de las bases del régimen de autónomos y General o la asunción vía impuestos de las prestaciones por muerte y supervivencia.